A pesar de las sentencias firmes, los responsables siguen libres. Madres, padres y sobrevivientes exigen a la nueva Suprema Corte que deje de proteger criminales.
La herida que no cierra: una ciudad que no olvida
El sol no perdona, pero tampoco lo hace el silencio judicial. A 16 años del incendio en la Guardería ABC, que cobró la vida de 49 niñas y niños, miles de personas volvieron a marchar en Hermosillo. Desde las ruinas carbonizadas en la colonia Y Griega, hasta el corazón de la ciudad, caminaron madres, padres, sobrevivientes y cómplices de la memoria. No hubo pasos en vano: hubo rabia, dignidad y una exigencia clara a los nuevos ministros de la Suprema Corte: justicia ya.
“La justicia se mide en impunidad”: madres alzan la voz
“La justicia en este país se mide en impunidad”, gritó Patricia Duarte Franco, mamá de Andrés Alonso, con la fuerza de una madre que no ha olvidado, ni va a olvidar. En nombre del Movimiento 5 de Junio, volvió a poner el dedo en la llaga que las autoridades han querido sellar con indiferencia. Hay condenas firmes. Hay responsables. Pero no hay cárcel.
Una tragedia anunciada: diseño fallido, silencio institucional
El incendio, iniciado en una bodega de la Secretaría de Hacienda, no solo calcinó un inmueble subrogado por el IMSS. Calcinó la confianza en las instituciones. El diseño fallido del edificio, las omisiones, los muros compartidos, los boquetes por donde entró el humo asesino… todo fue una cadena de negligencias avalada por el poder.
Responsables libres: los apellidos que sí se protegen
Y el poder, hasta hoy, ha respondido con protección a los suyos.
Sí, a los suyos.
Como Marcia Matilde Altagracia Gómez del Campo Tonella, prima de Margarita Zavala. Como Ignacio Alduenda Salazar. Como Jesús Davis Osuna. Como Manuel Gaxiola Santacruz. Exonerados. Liberados. Intocables.
Danna Paola: la sobreviviente que no se rinde
Pero no todo es impunidad. Hay sobrevivientes.
Como Danna Paola Villarreal Montaño, que ha pasado por más de 35 cirugías. Que se ha levantado, una y otra vez. Que quiere estudiar Derecho. Porque sabe que lo que vivió no se debe repetir. Y porque quiere defender a quienes nadie defiende.
La ciudad se detiene, la exigencia sigue en marcha
Cada 5 de junio Hermosillo se detiene.
El calor vuelve.
El recuerdo arde.
Y la justicia sigue ausente.
Pero no por siempre.