El director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero Oropeza, anunció que México ha logrado reducir drásticamente su dependencia de gasolina importada, pasando del 75% al 7% de las compras al extranjero. Esta medida, parte de una política de fortalecimiento del Sistema Nacional de Refinación (SNR) de petróleo, se ha implementado por razones de seguridad nacional.
Romero Oropeza destacó que esta estrategia no solo tiene implicaciones financieras, sino que también responde a la necesidad de garantizar la seguridad energética del país. Reveló que México ahora cuenta con una reserva para 9.9 días de consumo de gasolina, aunque aún está por debajo de otros países como Estados Unidos y Japón, que tienen reservas cercanas a 120 días.
Al inicio del gobierno actual en 2018, México enfrentaba un déficit de 927 mil barriles diarios de combustibles, lo que representaba el 75% del consumo nacional. Sin embargo, se espera que para septiembre de este año, el déficit se reduzca a solo 77 mil barriles diarios, equivalente al 5.8% del consumo nacional proyectado.
Para lograr esta reducción en la dependencia de gasolina importada, Pemex ha llevado a cabo una serie de acciones, incluida la rehabilitación de las seis refinerías que conforman el SNR, así como la adición de capacidad de refinación en Deer Park, Texas. Además, se han realizado inversiones significativas, con un total de 575 mil millones de pesos durante esta administración, lo que ha permitido aumentar la producción de crudo y elevar las reservas de hidrocarburos.
Romero Oropeza también destacó la contribución de Pemex a las finanzas públicas, señalando que entre 2019 y 2023, la empresa pagó impuestos y derechos por un total de 3 billones 802 mil millones de pesos, mientras que recibió transferencias del gobierno federal por 869 mil millones de pesos. Esto resulta en una contribución neta de 2 billones 933 mil millones de pesos en cinco años.
En contraste, el director de Pemex rechazó las críticas de agencias calificadoras y organismos privados sobre la solvencia de la empresa, argumentando que Pemex no es una carga para las finanzas públicas y que contribuye significativamente al presupuesto público, aportando el 17% de cada 100 pesos.
Estos logros contrastan con el periodo anterior, en el gobierno del ex presidente Enrique Peña Nieto, donde la producción de crudo disminuyó, las reservas de hidrocarburos se redujeron y la deuda de la empresa aumentó considerablemente.
En resumen, el fortalecimiento del sistema nacional de refinación de petróleo ha permitido a México reducir su dependencia de gasolina importada, mejorando así su seguridad energética y contribuyendo positivamente a las finanzas públicas.
