El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que los recientes episodios de violencia en Sinaloa son resultado de una disputa entre dos facciones criminales: Los Chapitos y el grupo de Ismael “El Mayo” Zambada. Esta confrontación se ha intensificado tras la captura de Zambada, quien actualmente está detenido en Estados Unidos. Durante su conferencia matutina, López Obrador mencionó que el gobierno estadounidense no ha proporcionado detalles adicionales sobre las detenciones de Joaquín Guzmán López y Zambada, este último habiendo denunciado su arresto como un secuestro orquestado por Los Chapitos. “Estamos esperando más información, pero esa es la causa del enfrentamiento”, explicó.
El presidente hizo un llamado a la calma y aseguró que el gobierno federal ha aumentado su presencia en Sinaloa mediante el despliegue del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional. Reconoció que, debido a la violencia, las clases han sido suspendidas en Culiacán, y aunque hay temor en la población, el gobierno está tomando medidas. No obstante, criticó a los medios de comunicación por lo que consideró una cobertura sensacionalista de la situación, afirmando que en el pasado se mantenía un “pacto de silencio”. “Quieren incendiar al país a través de redes sociales y periódicos, es como la antigua Alarma”, comentó en referencia a la prensa sensacionalista.
Además, López Obrador abordó la violencia en Chiapas, donde también se enfrentan grupos del crimen organizado en los municipios de Chicomuselo y Frontera Comalapa. Aseguró que esta situación ya está siendo atendida por las autoridades.
En una evaluación general sobre la seguridad, el mandatario destacó que la reducción de homicidios ha sido uno de los mayores desafíos, aunque aseguró que se ha logrado una disminución del 19 por ciento en los últimos años. Atribuyó la situación de violencia a décadas de abandono, señalando que gobiernos anteriores no atendieron las causas estructurales como la pobreza, el desempleo y la falta de oportunidades para los jóvenes. “Recibimos un país con muchos problemas, con al menos dos sexenios de abandono”, dijo.
López Obrador destacó los avances en su administración, como la creación de la Guardia Nacional y la reforma constitucional que permite la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad. Según el presidente, las reuniones diarias de su gabinete de seguridad han permitido tomar decisiones más efectivas.
Además, expresó confianza en que la lucha contra la inseguridad continuará en el próximo sexenio, destacando que la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, es una persona “recta, estricta y muy capaz”, por lo que espera que los esfuerzos en materia de seguridad se consoliden bajo su liderazgo.