Cada 15 de octubre se conmemora el Día Internacional de las Mujeres Rurales, una fecha destinada a reconocer la contribución esencial de estas mujeres en los sistemas alimentarios y en el desarrollo económico de sus comunidades. En 2024, el tema elegido por la ONU, “Las mujeres rurales cultivan alimentos de calidad para todas las personas”, pone en valor el papel de las mujeres en la producción y distribución de alimentos a nivel global.
A pesar de su relevancia, las mujeres rurales continúan enfrentando desigualdades profundas en cuanto al acceso a derechos básicos y a la propiedad de la tierra. En México, por ejemplo, aunque el 34% de las personas que trabajan en la agricultura son mujeres, solo el 13% de ellas posee la tierra que labran. Esta disparidad es solo una muestra de las múltiples barreras que estas mujeres enfrentan.
Mujeres rurales en México: Desigualdad persistente
En México, cerca del 23% de las mujeres residen en zonas rurales, de acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2020 del INEGI. Las actividades económicas en estas regiones están centradas en la agricultura y la ganadería, aunque muchas mujeres también participan en la elaboración de textiles y artesanías.
Sin embargo, las cifras muestran una realidad difícil: las mujeres rurales tienen menos acceso a derechos fundamentales como la educación, la salud y la seguridad social, en comparación con los hombres rurales y las mujeres urbanas. Por ejemplo, la tasa de analfabetismo entre las mujeres rurales es del 14%, en contraste con el 5% en áreas urbanas. Además, el 60% de las mujeres rurales carecen de acceso a servicios de salud, según datos del Coneval, lo que agrava problemas como el embarazo adolescente y el matrimonio infantil.
La violencia y los obstáculos en la denuncia
Las mujeres rurales también enfrentan mayores tasas de violencia física y sexual, según la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh). No obstante, la falta de recursos, información y acceso a mecanismos de denuncia en sus comunidades dificulta la protección efectiva contra estas violencias.
Un llamado a la acción
La ONU hace un llamado a los gobiernos para que promuevan políticas públicas que incorporen la perspectiva de género y que prioricen a las comunidades rurales, con el fin de garantizar a las mujeres acceso a educación, salud y tecnología. Empoderar a las mujeres rurales no solo es clave para su bienestar, sino también para asegurar la sostenibilidad de los sistemas alimentarios y la justicia social en sus comunidades.
En este Día Internacional de las Mujeres Rurales, es fundamental reconocer que, aunque su labor es indispensable, los desafíos que enfrentan aún requieren mayor atención y acción por parte de los gobiernos y la sociedad.