Claudia Sheinbaum, presidenta de México, reafirmó su confianza en la estrategia de seguridad implementada durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a cinco años del “culiacanazo”. Este incidente, ocurrido en octubre de 2019, se caracterizó por la fallida captura de Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, lo que desató una ola de violencia en Culiacán, Sinaloa.
Durante la Mañanera del Pueblo, Sheinbaum destacó la importancia de la extradición de Ovidio Guzmán a Estados Unidos, realizada en septiembre de 2023, como parte de los esfuerzos para combatir al crimen organizado. Aunque la estrategia de “abrazos, no balazos” ha sido objeto de críticas, la mandataria aseguró que, a largo plazo, los resultados serán visibles y la seguridad pública mejorará.
“Vamos a trabajar con el pueblo de Sinaloa, siempre. Y tenemos una estrategia de seguridad que va a funcionar, lo que NO va haber es una guerra contra el narco y tampoco la colusión que hubo y que fue demostrada por un juez de EEUU en el gobierno de Calderón”.
Sheinbaum defendió las acciones del gobierno de López Obrador, enfatizando que se han enfocado en las causas estructurales de la violencia, como la pobreza y la desigualdad, las cuales considera fundamentales para reducir la criminalidad en el país. Además, reafirmó que el enfoque integral en la lucha contra el narcotráfico será una prioridad en su administración. El “culiacanazo” ha sido un tema recurrente en el debate sobre seguridad en México, y la postura de Sheinbaum refleja su alineación con las políticas del actual gobierno.