Culiacán, Sinaloa, 23 de noviembre de 2024.- Rubén Miranda López, director general del Instituto Sinaloense para la Educación de los Adultos (ISEA), presentó un balance sobre los avances y retos en la atención educativa para adultos en Sinaloa, destacando la implementación de un proyecto de enfoque humanista. Según el funcionario, el estado ocupa el lugar 16 a nivel nacional en aportación a la reducción del rezago educativo, con una población mayor de 15 años de 2.38 millones, de los cuales 635 mil enfrentan rezago educativo, incluyendo analfabetismo y niveles inconclusos de primaria y secundaria.
Los municipios con mayores desafíos en este ámbito son Badiraguato, Choix, Sinaloa y Mocorito, debido a las distancias entre comunidades y la compleja geografía. A pesar de estas dificultades, Miranda López informó que Sinaloa ha superado la meta asignada por el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA) para 2024, alcanzando un 105.33% de logro, con 17,569 personas que avanzaron en su nivel educativo hasta octubre.
En cuanto a indicadores de evaluación nacional, el ISEA ocupa el séptimo lugar gracias a su desempeño en eficiencia, eficacia, operación y calidad en los procesos educativos. Entre 2021 y 2024, más de 54,900 sinaloenses han mejorado su nivel educativo, reflejando un crecimiento significativo desde el inicio de la actual administración estatal.
Miranda López también presentó un proyecto innovador denominado Índice de Bienestar Educativo para la Atención de Adultos (IBESA), que busca medir no solo los avances educativos de los estudiantes, sino también su impacto en aspectos emocionales, sociales y productivos. Este índice considera cuatro dimensiones clave:
- Actitud y valores cívicos
- Aspectos emocionales y afectivos, como autoestima y seguridad
- Capacidades cognitivas y procedimentales, incluyendo productividad y generación de nuevos aprendizajes
El modelo de evaluación incluye tres etapas: un diagnóstico inicial, un seguimiento intermedio y una evaluación final al concluir los estudios. Esto permitirá identificar áreas de mejora en los contenidos y métodos educativos para maximizar el impacto en el desarrollo integral de los estudiantes.
Con esta iniciativa, el ISEA busca no solo reducir el rezago educativo, sino también transformar vidas, promoviendo el desarrollo personal y social de los adultos atendidos. Concluyó que la educación no solo se mide en números, sino en la capacidad de transformar a las personas en mejores ciudadanos y seres humanos.