La nueva dirigencia de Morena, presidida por Luisa María Alcalde Luján, junto con la secretaria general, Carolina Rangel, y el secretario de organización, Andrés Manuel López Beltrán, realizaron una asamblea informativa en Culiacán. El evento se llevó a cabo en el Polideportivo Juan S. Millán, que se llenó de asistentes. A continuación, algunos pormenores de la asamblea:
Lo positivo
- 263 mil afiliados. La presidenta del partido, Luisa María Alcalde, informó a los militantes que se iniciará un proceso de afiliación con la meta de alcanzar 10 millones de afiliados en todo el país. Actualmente, Morena cuenta con 2 millones de miembros, pero en las últimas elecciones, gracias a Claudia Sheinbaum, lograron una votación de 36 millones de ciudadanos. En el caso de Sinaloa, la meta es llegar a 263 mil afiliados.
- “Morena no es de nadie.” Otra situación positiva que destacó Luisa María Alcalde fue su énfasis en que “Morena no es de nadie.” En el pasado, existía una división entre los fundadores del partido en 2014 y aquellos que se unieron en 2018, con los primeros reclamando mayores derechos por ser los fundadores. Esta declaración busca unificar al partido.
- Luisa María Alcalde lee la cartilla a los funcionarios. Durante la asamblea, la presidenta de Morena hizo que los representantes populares firmaran un decálogo con principios como: “Los servidores públicos de Morena se deben al pueblo y deben ser leales a ellos”; “La corrupción no se tolera. No hay cabida al nepotismo, amiguismo o influyentismo; tampoco a aviadores”; y, “El poder se ejerce con humildad. No hay espacio para banalidades.” Vaya que hacia falta en Sinaloa.
Lo negativo
- Llegan tarde. Aunque la asamblea estaba programada para las 11:00 a. m., comenzó con más de una hora de retraso, lo que lamentablemente se ha vuelto una costumbre entre los dirigentes de Morena. Muchos militantes, que se trasladaron desde diferentes partes del estado, tuvieron que esperar. Antes de la asamblea, los dirigentes nacionales sostuvieron una reunión previa con legisladores locales y federales, presidentes municipales, y senadores en el hotel Wyndham, lo que alargó el inicio del evento. Esto refleja un trato desigual hacia la militancia, donde parece haber “militantes de primera y de segunda.” Eso no es congruente con los valores de Morena.
A destacar
- Andy, el más aplaudido. El secretario de organización, Andrés Manuel López Beltrán, fue quien se llevó los mayores aplausos de la asamblea. Ninguno de los asistentes fue tan ovacionado como el hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador, lo que demuestra el cariño, estima y reconocimiento que la militancia aún tiene hacia el líder retirado. Cabe destacar que la entrada de “Andy” a la política no es casual, así como tampoco lo son los ataques mediáticos que ha recibido por parte de periodistas como Loret de Mola y otros medios de derecha. Por otro lado, algunos presidentes municipales llevaron porras y hasta matracas, replicando viejas prácticas políticas heredadas del PRI. Estas acciones desentonan con los valores de Morena y no son bien vistas por la militancia.
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