Ciudad de México. El gobierno de Estados Unidos suspendió temporalmente, por 15 días, la importación de ganado en pie, caballos y bisontes vivos desde México, debido a la reaparición del gusano barrenador del Nuevo Mundo (GBN), una plaga que amenaza la salud animal y humana.
La medida fue anunciada por Brooke L. Rollins, titular del Departamento de Agricultura de EE.UU., quien afirmó que entra en vigor de inmediato y aplica a todos los puertos de entrada en la frontera sur. “La última vez que esta devastadora plaga invadió Estados Unidos, nuestra industria ganadera tardó 30 años en recuperarse. Esto no puede volver a suceder”, advirtió en su cuenta de X.
El secretario mexicano de Agricultura, Julio Berdegué, confirmó la suspensión a través de redes sociales, luego de ser notificado por su homóloga estadounidense. Aunque expresó su desacuerdo, dijo confiar en que pronto se alcanzará un nuevo acuerdo bilateral.
🔬 El origen del conflicto
El Departamento de Agricultura estadounidense informó que se han detectado casos del gusano barrenador en regiones remotas de México, incluso tan al norte como Oaxaca y Veracruz, a más de 1,100 km de la frontera. El parásito, en fase de larva de la mosca Cochliomyia hominivorax, puede invadir tejidos de animales de sangre caliente, causando lesiones severas, e incluso la muerte.
El 17 de abril, la Secretaría de Salud mexicana confirmó el primer caso humano en Chiapas: una mujer de 77 años fue diagnosticada con miasis por gusano barrenador. Esto llevó al gobierno mexicano a emitir un aviso epidemiológico.
🚫 Críticas por medidas insuficientes
Estados Unidos acusa a México de debilitar las acciones de control sanitario: limitó a seis días semanales los vuelos de fumigación y aplicó aranceles a piezas de avión usadas en la lucha contra la plaga. Ya en noviembre, Washington había restringido las importaciones, pero revirtió la decisión en febrero tras nuevos protocolos de revisión.
🇲🇽 Respuesta mexicana
La presidenta Claudia Sheinbaum declaró que México ya está reforzando sus sistemas de control sanitario desde la frontera sur. Sin embargo, advirtió que algunos señalamientos estadounidenses son “excesivos” y forman parte de una “campaña negativa” que intenta usar a México “como piñata”.
La controversia se da en un contexto de crecientes tensiones bilaterales, que incluyen aranceles del 25% a productos como acero, aluminio y autopartes mexicanos, impuestos recientemente por el gobierno de Donald Trump, a pesar de lo establecido en el T-MEC.