Profe Joel Álvarez Borrego
El Sistema Educativo Nacional, para su buen funcionamiento, no sólo requiere de buenos planes y programas de estudios, no sólo de libros de texto gratuito, de profesionales de la educación preparados y entregados a una de las tareas más importantes como lo es la educación de la niñez, de la adolescencia y de la juventud mexicana.
Se requiere además de edificios escolares que cumplan no solo con lo más elemental sino con lo necesario para la preparación de los educandos. Cada edificio escolar debe contar con aulas y mobiliario adecuados, con aire acondicionado, condiciones higiénicas y muebles adecuados para que los educadores resguarden su material didáctico. Debe contar con canchas deportivas, biblioteca, laboratorios, jardines, agua potable confiable, y un buen etc.
¿Pero cuál es la realidad? Por muchas décadas los edificios escolares presentan serios problemas en su infraestructura. Ante esta situación los educadores se ven en la necesidad de convertirse en gestores para conseguir algunos insumos que les permitan realizar arreglos al edificio escolar. La ayuda por parte de los gobiernos municipales, estatales y federal brillaba y sigue brillando por su sordera y silencio ante el problema.
Para poder solventar una buena cantidad de gastos entre ellos el pago de energía eléctrica, el pago de agua potable, pintura y muchos más, los educadores en común acuerdo con las sociedades de padres de familia se vieron en la necesidad de solicitar la famosa cuota voluntaria, contraria a todas luces a la gratuidad establecida en el artículo tercero constitucional, surgiendo como “un mal necesario”.
Mientras no exista un apoyo constante de las autoridades gubernamentales este tipo de “males” seguirán existiendo.
¿Qué hacer ante esta situación?
1.- Los gobiernos municipales, estatales y federal deberán poner en práctica la llamada austeridad republicana para poder asignar subsidios satisfactorios a cada uno de los edificios escolares, sean estos de zonas urbanas, semiurbanas y rurales.
2.- Mientras lo anterior no suceda es conveniente seguir con “el mal necesario”, sobre todo con los padres con una mejor solvencia.
3.- A ningún educando se le debe prohibir su ingreso si los padres no pueden cumplir con el requisito de la cuota.
4.- Procurar que los directivos escolares y la sociedad de padres de familia realicen un uso honesto de los recursos económicos recaudados.
Mientras tanto seguiremos contando con edificios escolares del tercer mundo.
1 Comment
Desde mi punto de vista se debe investigar por medio de la Secretaria de la Transparencia cuántos empleados de la educación cobran sin trabajar por centros de Trabajo, Zonas Escolares, Supervisiones Escolares, Jefaturas Escolares y principalmente en la SEPYC para que haya una investigación real de los Trabajadores de la Educación pero también investigar al SNTE53 y a todos los que tienen una duplicidad en Secretarias porque el Secretario General no respeta los Resultados de la Elección del 20 de enero de 2021 y obviamente apoyado por la SEPYC Y EL GOBERNADOR RUBEN ROCHA MOYA