Hoy es el día de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el enfrentamiento entre el expresidente Donald Trump y la actual vicepresidenta Kamala Harris se presenta más reñido que nunca.
Las encuestas sobre las elecciones presidenciales en Estados Unidos muestran prácticamente un empate entre Kamala Harris y Donald Trump. Se espera que la diferencia se resuelva en siete estados en disputa llamados “estados clave”.
Harris aventaja en voto popular con un 48 % a Trump, que tiene un 46,9 %, según el agregador de encuestas Five Thirty Eight, lo que pone a la demócrata 1,1 puntos por encima del republicano.
Los estados clave para decidir el resultado final incluyen Arizona, Georgia, Michigan, Pensilvania, Carolina del Norte y Wisconsin, donde las encuestas muestran resultados muy ajustados.
Principales Propuestas de los Candidatos
- Kamala Harris: En su campaña, la vicepresidenta ha centrado su mensaje en la ampliación de los derechos civiles, el fortalecimiento de la economía para la clase media, y la implementación de políticas de justicia climática. Promete políticas de salud más accesibles y una reforma para la reducción de la violencia con armas de fuego.
- Donald Trump: El expresidente, por su parte, ha puesto énfasis en reducir los impuestos, desregular industrias y reforzar la seguridad fronteriza. Además, Trump ha prometido reducir el rol del gobierno en la economía y priorizar políticas de “América Primero”, enfocándose en limitar el gasto exterior y reforzar las industrias nacionales.
Estados Clave o “swing states”
Ambos candidatos concluyeron sus campañas en los estados bisagra o swing states, aquellos donde el voto puede inclinarse hacia cualquiera de los partidos y, por lo tanto, ser decisivos. Por el contrario, estados como California, Oregón y Nueva York han mostrado una tendencia histórica a favor de los demócratas, lo que hace improbable una victoria de Trump allí. Texas, Florida y los estados del cinturón bíblico se inclinan tradicionalmente hacia el Partido Republicano, siendo bastiones clave de apoyo conservador.
A pesar de que la mayoría de los estados tienen una preferencia clara de voto, existen siete estados bisagra en los que cualquiera de los candidatos podría ganar: Georgia, Carolina del Norte, Wisconsin, Míchigan, Pensilvania, Nevada y Arizona.
En las encuestas agregadas de los últimos días, la candidata demócrata mantiene una ligera ventaja en Wisconsin (10 votos electorales) y Míchigan (15 votos electorales), con un 48.3 % frente al 47.3 % en Wisconsin y un 48 % frente al 47 % en Míchigan, lo que supone una diferencia de apenas una décima en ambos casos.
Por otro lado, el expresidente republicano se encuentra ligeramente por delante en Carolina del Norte (16 votos), Georgia (16 votos) y Arizona (11 votos), con una ventaja de entre uno y dos puntos en estos estados. Las encuestas muestran un 48.3 % para Trump frente al 47.3 % de Harris en Carolina del Norte, un 48.4 % frente al 47.2 % en Georgia, y un 48.9 % frente al 46.6 % en Arizona, este último siendo el estado donde Trump cuenta con la mayor diferencia a su favor.
En Pensilvania (19 votos electorales) y Nevada (6 votos), la competencia es extremadamente reñida, ya que ambos candidatos están casi empatados. Hace unos meses, Harris mantenía una ligera ventaja en estos estados, pero actualmente el panorama parece favorecer a Trump dentro del margen de error. En Pensilvania, Trump lidera con un 47.9 % frente al 47.8 % de Harris, mientras que en Nevada, el republicano tiene un 47.8 % frente al 47.4 % de Harris, situando a ambos candidatos en una situación de virtual empate.
La estrechez de estas cifras resalta la importancia de los estados bisagra, que podrían decidir la elección en medio de un clima político polarizado.
