El periodista Abel Barajas del rotativo El Reforma accesó a la solicitud de orden de aprensión que realizó la Fiscalía General de la República contra Luis Videgaray exsecretario de Hacienda durante la administración peñista.
En dicha orden se dice que el ex presidente Peña Nieto “fue autor mediato de los delitos mencionados y los de carácter electoral” y “cometió los ilícitos utilizando como instrumento a Videgaray y a Emilio Lozoya Austin, exdirector de Pemex”.
La acusación contra el expresidente sería también por traición a la patria y está relacionado con el caso Odebrecht y el uso de dichos recursos para financiar la campaña presidencial para obtener contratos ventajosos en la administración priista.
“Peña, dice en su consideración la FGR, se apartó del Estado de Derecho y utilizó el cargo para el que fue electo con el fin de delinquir. Con su actuar ilícito no sólo obtuvo beneficio personal sino procuró ‘también el beneficio de la empresa Odebrecht quien los había ya hecho objeto de cohecho, traicionando a la Patria con su mal desempeño’”.
Hace unas semanas el periodista del El Universal, Salvador García Soto, escribió que Peña estaba en pánico, pero no por la orden de aprensión contra Videgaray, sino por las declaraciones que podría hacer Emilio Zebadúa González quien fungía como oficial mayor en SEDATU y SEDESOL cuando se desarrolló la “Estafa Maestra”. Emilio se había acercado a la FGR para sujetarse al beneficio de un criterio de oportunidad (convertirse en testigo colaborador).
“Está apanicado, aterrado y ya se quiere mover de Madrid porque teme que haya acusaciones en su contra”, nos dijo la fuente cercana al expresidente Peña Nieto.
También hace unos días, en una entrevista con Loret de Mola el empresario inmiscuido en la corrupción por agronitrogenados y dueño de Altos Hornos de México sugirió a Peña que “corra”.
“Pues mire, lo primero, que corra, que se busque Timbuctú” dijo Alonso Ancira sobre Peña.