Ciudad de México, diciembre de 2024.-México albergará, por segunda ocasión, el Encuentro Continental de Solidaridad con Cuba, programado para realizarse del 9 al 12 de octubre de 2025. En una conferencia de prensa celebrada en la embajada cubana en México, Fernando González Llort, presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), anunció la convocatoria al evento, destacando los desafíos crecientes que enfrentará Cuba debido a posibles medidas más severas por parte del gobierno de Estados Unidos, encabezado por Donald Trump.
Objetivos del Encuentro
El evento reunirá a movimientos sociales, diplomáticos y activistas de toda América Latina y otros continentes con el fin de:
- Fortalecer la lucha contra el bloqueo económico y la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo.
- Promover la solidaridad económica frente a las adversidades que enfrenta la isla, como contingencias energéticas, huracanes y sismos.
- Desarrollar estrategias de resistencia mediática contra campañas desinformativas y fortalecer la narrativa a favor de Cuba en el ámbito internacional.
Reconocimiento a la solidaridad mexicana
En la rueda de prensa, José Ángel Maury de Toro, consejero político de la embajada cubana, destacó los resultados tangibles del apoyo mexicano, especialmente en el fortalecimiento del sistema de salud cubano. Israel Bretón, del Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba, subrayó el orgullo de que México haya sido designado nuevamente como sede de este importante encuentro.
Condena internacional al bloqueo
La condena global al embargo económico impuesto por Estados Unidos sigue siendo un tema recurrente en Naciones Unidas. En octubre de este año, 187 países votaron nuevamente en la Asamblea General para rechazar el bloqueo, con la oposición de Estados Unidos e Israel, y la abstención de Moldavia. Según cifras de la cancillería cubana, el embargo genera pérdidas anuales superiores a los 5 mil millones de dólares.
El encuentro en México buscará generar acciones concretas para enfrentar estos retos y reafirmar los lazos de cooperación entre los movimientos de solidaridad y la isla caribeña.
