Ciudad de México.- Un intenso intercambio entre Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, y Alejandro Moreno Cárdenas, senador del PRI, marcó la sesión en la que se dio la declaratoria constitucional de la reforma de supremacía constitucional. La tensión surgió cuando los senadores del PRI solicitaron que no se ratificara la reforma debido a presuntas irregularidades.
Ante la insistencia del PRI, Fernández Noroña intentó seguir con la sesión argumentando que la reforma ya estaba aprobada, pero Moreno Cárdenas, líder del PRI, se dirigió a la tribuna para exigir la reanudación del debate. El morenista sugirió que Moreno pidiera la palabra desde su escaño, lo que el priista rechazó, acercándose e insistiendo en su demanda, lo que elevó aún más el tono de la discusión.
La confrontación escaló cuando Moreno apuntó su dedo hacia Fernández Noroña, quien respondió molesto: “No me ponga el dedo encima”. El priista replicó en voz alta, “a mí no me grites, vine a pedir la palabra”, y Noroña exigió respeto a su rol. El intercambio continuó hasta que Fernández Noroña ordenó que la Secretaría retomara la agenda.
Un incidente adicional también quedó registrado: la senadora de Morena, Lucía Trasviña, fue vista empujando con el codo a la senadora priista Karla Toledo, quien se había acercado al presidente del Senado para pedir que el debate siguiera.
A pesar de estos episodios, la sesión continuó con intervenciones de senadores a favor y en contra de la reforma, la cual busca blindar las reformas de la 4T de posibles acciones de inconstitucionalidad.