Por Joel Álvarez Borrego
No se requiere ser un erudito en el área de la Sociología para darnos cuenta de que un gran porcentaje de la humanidad transita por la vida sin rumbo fijo, sin darle sentido a su existencia, ni construirse un propósito como lo propone Viktor Frankl en su libro “El hombre en busca de sentido”, para el logro de una vida mejor. Por lo regular el ser humano camina por su vida buscando arquetipos que copiar y que no le ayudan en nada a su vida propia. Se sujeta a las costumbres y a las circunstancias repitiendo lo que muchas veces otros han echo mal.
Si se viste así, yo también,
Si toma licor, yo también,
Si es creyente y no entiende porqué, yo también,
Si es ateo y no lo sabe explicar, yo también,
Si no estudia, yo también.
Para Albert Camus ( 1912-1960) premio Nobel de literatura “ El verdadero problema de la existencia del hombre…es hallar un sentido a su vida”.
Para George Orwell, autor de la obra “1984”, “Los grupos en el poder buscan mantener a la gente en la ignorancia y se le hace creer que es libre cuando en realidad vive en la esclavitud”.
Por otro lado, José Saramago, escritor portugués, nos dejó estas palabras, “ Llegará el día en que la inteligencia será despreciada y la estupidez será adorada”.
O como esto que me encontré en Facebook, “Los esclavos modernos no están encadenados sino desinformados, adoctrinados y manipulados”.
En toda su obra, hay en el autor francés (Albert Camus) “Una búsqueda por plantear el sentido de la existencia y por afrontar la desesperación, la apatía y el caos del ser humano, pero no con falsos espejismos, sino a partir del reconocimiento de la realidad para trascenderla por medio de la conciencia y, de tal forma, examinar nuestros actos antes de llevarlos a cabo”.