Prof. Joel Álvarez Borrego
Fue un 14 de diciembre de 1914 cuando trabajadores electricistas realizaron la asamblea constitutiva del “Sindicato de Empleados y Obreros del Ramo Eléctrico”.
En 1935, con el apoyo del gobierno federal se creó el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM)
En febrero de 1936 se crea la Confederación de Trabajadores de Mexico (CTM).
El 28 de agosto de 1938 se crea la Confederación Nacional Campesina (CNC).
El SNTE fue creado en 1944 por auspicio del gobierno mexicano, el cual convocó a la unificación de las organizaciones magisteriales entonces existentes para que conformaran una organización de carácter “nacional” que agrupara a los trabajadores de educación básica y secundaria de cada uno de los estados y municipios.
El SNTE obtuvo el monopolio de la representación de los maestros de mano del presidente Avila Camacho, quien ordenó a la Secretaría de Hacienda que retuviera la cuota sindical a los maestros y la entregara al secretario general del SNTE.
Una vez mencionada la creación de algunos de los sindicatos más fuertes de la República mexicana y dado por echo que con las fechas señaladas les será fácil ubicar a quienes fungieron como presidentes de la Nación y recordando al PNR como bisabuelo del PRI, al PRM como el abuelo, y al PRI como el papá de los pollitos por 7 décadas, podemos señalar que, para la existencia de un control férreo, por parte del Estado, de las agrupaciones obreras, campesinas y magisteriales, se puso en práctica un corporativismo rapaz que fue capaz de hundir en la pobreza a la masa trabajadora campesina, obrera y magisterial y envilecer con el dinero a manos llenas a los falsos líderes de los sindicatos y organizaciones antes mencionados. La dictadura perfecta, señalada por Vargas Llosa, nació y se mantuvo en el poder controlando todo a su antojo.
En el caso de los líderes magisteriales, que daban todo su apoyo al PRI, como partido oficial, se les premiaba con cuotas de poder. Así se logró que muchos “maestros” ocuparan Regidurías, presidencias municipales, diputaciones locales y federales, senadurías y Gubernaturas. Todo para su beneficio personal, sin soltar prenda para los trabajadores de la educación, salvo pocas honradas excepciones.
Durante el periodo de la dictadura perfecta y los dos sexenios del Partido Acción Nacional (PAN) se suscitó un fenómeno especial en las mayoría de las masas magisteriales, parecido al que señala el escritor José Saramago en su libro “Ensayo sobre la ceguera”.
Dicho fenómeno todavía acontece en muchos afiliados al SNTE, están tan ciegos que todavía siguen dócilmente los rumbos que sus “líderes” les indican, actualmente les están cambiando el disco duro, ya no hay que gritar a favor del PRI sino de MORENA, pues saben que la dictadura tiene tiempo que se está derrumbando. Cuanta razón tenia el cantor Facundo Cabral cuando decía “la culpa no es del cerdo sino del que lo alimenta”, si hubiera un poquito de razonamiento en las masas amaestradas los “lideres” se derrumbarían y se mejoraría la situación laboral del magisterio en su conjunto. Ya lo señaló Simone de Beauvoir, mientras los oprimidos sigan apoyando a los grupos en el poder la situación no mejorará.
El magisterio tiene una oportunidad a la vuelta de la esquina, los grupos disidentes de todo el país se están unificando para emprender una lucha democrática y poder quitar del poder sindical a los falsos líderes que lo único que saben hacer es engordar el bolsillo.
Unámonos a ellos.
